lunes, 31 de enero de 2011

UNA HERMANA CON MUCHA PERSONALIDAD

Un día de colegio en preescolar, la profesora de mi hermana mandó dos fichas de deberes y de repente dice mi hermana:
-No hago más deberes si no salimos un poco al patio para jugar.
La profesora le dijo que tenía que hacerlas, que era su obligación y que después saldrían al recreo. Y dijo ella :
- Que no, que no y que no, ¡ ya estoy arta de tantas fichas ! ¡ quiero ir al patio !.
En ese momento un niño dijo que el tampoco haría  los deberes, después otro y otro y otro. En fin, se puede decir que ella puso su clase en rebelión, con tal de no hacer las fichas.

Cuando ella tenía un año y medio, no sé por qué decía que se llamaba Julio y que todos los jueves se llamaba así, aunque su nombre era Julia. Todo empezó así:
 Un día, por la tarde decidió llamarse Julio y nosotros le preguntábamos que por qué y ella siempre respondía que lo decía porque quería y ya está. Lo que más gracia me hacía era  cuando le llamabas Julia y no te respondía, como si no existiese otro nombre que Julio. Unos días después le dijo mi madre:
- Julia, sube para bañarte.
Mi hermana más callada que una momia. Mi madre no sabía que lo del tema de Julio iba a durar tanto así que no paró de decir Julia y Julia, hasta que se hartó y dijo Julio. Claro, todo esto por supuesto pasó un jueves. Entonces en ese mismo momento dijo :
- ¿ Qué pasa ? ¿ qué hay que bañarse ya ? No sé si te acordarás pero hoy me llamo Julio.

Todas las historias, bueno casi todas son de mi hermana, es porque como había dicho en el título, porque es :


UNA HERMANA CON MUCHA PERSONALIDAD

No hay comentarios:

Publicar un comentario